Un revestimiento que pasó de moda muy rápidamente es el gotelé. Hace unos años todas las construcciones nuevas tenían un recubrimiento de gotelé, como una técnica innovadora de decoración.
Con el paso del tiempo, ya se dejó de usar y lo que más se pide es quitar el gotelé de todas las paredes de la casa. Conoce cuáles son las razones por las que ya no se quiere este tipo de revestimiento y cómo se quita de nuestras paredes.
¿Qué es el gotelé?
El gotelé es un revestimiento de paredes que consiste en esparcir una pintura más espesa de lo normal. Dicha pintura se denomina al temple o un añadido de pastas densificantes y al aplicarla con pistolas de proyección de aire comprimido, tirolesas o rodillos especiales forma una gran cantidad de grumos o gotas. Dicha rugosidad depende de la composición de la pintura utilizada y el espesor.
En algunas ocasiones se aplica una sola capa y en otras dos o más en distintas direcciones, de acuerdo al acabado que desea dar. El tiempo normal de secado al tacto suele ser entre las 2 y 4 horas.
¿Cuál es la función de usar gotelé?
Como es un revestimiento irregular se utilizaba para disimular las imperfecciones de las paredes. Los posibles desniveles quedaban desapercibidos con esta técnica. Además, es muy económica y rápida.
Actualmente, se utilizan técnicas que ayudan a alisar correctamente las paredes. Por ejemplo, para aplicar el yeso correctamente se puede recurrir a miras metálicas para mantener una rectitud perfecta desde cualquier paramento horizontal o vertical.
¿Por qué ya no se usa el gotelé?
Una de las razones por las que se ha dejado de usar este revestimiento en paredes y techos es que es difícil de mantener. Por un lado, el polvo queda fácilmente atrapado en la rugosidad de la pared y por otro, se nota cuando se realiza alguna reparación porque no se puede reproducir la misma gota.
Además, el gotelé se utiliza para minimizar estéticamente las imperfecciones de la pared y actualmente existen materiales que le dan una mejor apariencia y una textura lisa. Una pared lisa es mejor apreciada por varias razones. Una de ellas es que es más fácil instalar un revestimiento o simplemente vinilo.
Por todos estos motivos, ya no se utiliza este tipo de revestimiento, es más, una de las reformas más solicitadas es quitarlo de toda la casa.
¿Cómo se quita el gotelé?
Quitar el gotelé lleva tiempo y dinero, porque se trata de quitarlo o cubrirlo con otro material hasta que quede completamente lisa. Las personas que se decidieron a quitarlo cuentan que la apariencia cambia radicalmente.
La técnica más sencilla es quitar este revestimiento y dejar la pared limpia. Para ello se debe humedecer toda la pared, esperar unos minutos y comenzar a raspar con una espátula hasta que caiga toda la rugosidad.
Posteriormente se aplica masilla para eliminar cualquier imperfección y dejarla lo más pareja posible. Después se debe aplicar una imprimación fijadora o selladora y una vez que se haya secado perfectamente podemos pintar las paredes y techos con pintura plástica del color que queramos.
La otra técnica consiste en cubrir todas las imperfecciones con una masilla que se adhiere a la pintura plástica. Una vez que está perfectamente cubierta se alisa hasta que quede perfectamente lisa.
Por lo tanto, se trata de un trabajo que puede durar 15 días o más dependiendo de las medidas y el estado actual de la pared.