Todo lo que debes saber sobre estufas electricas

Estufas eléctricas: lo que debes saber

Las estufas eléctricas son una muy buena opción para calentar tu hogar u oficina. Existen diferentes tipos de calefactores y cada uno de ellos es ideal para un tipo de ambiente. Además de conseguir la temperatura correcta del ambiente puede ser que te preocupe el consumo de energía.

¿Cuánto nos va a costar en la factura de la luz mantener caliente nuestro hogar? Eso dependerá del tipo de calefactor eléctrico que se haya elegido y cómo lo utilices. Aquí te contamos algunos consejos para mantener a tu hogar confortable y al mismo tiempo ahorrar algunos pesos en la factura de luz.

Ventajas de usar estufas eléctricas

La calefacción eléctrica tiene muchas ventajas al compararla con otro tipo de fuente de calor.

Eficiencia. Entre los primeros beneficios se encuentra la eficiencia para lograr la temperatura deseada en muy pocos minutos.

Transportables. Son muy fáciles de transportar, puesto que tienen un tamaño y formato ideal para trasladarla de un ambiente a otro.

Fácil instalación. La instalación es muy simple, solo necesitas contar con un enchufe de 220v libre para conectarla y listo.

Seguras. Los equipos modernos de calefacción eléctrica poseen sistemas de seguridad que lo apagan ante golpes. Además, no emiten vapores y no genera ningún residuo de combustión. Por lo tanto, se las puede utilizar de manera segura en ambientes pequeños que no tengan mucha ventilación.

Silenciosas. La mayoría de los dispositivos modernos de calefacción son silenciosos.

Tipos de estufas eléctricas

Una de las mejores soluciones para calentar nuestro hogar es utilizar una calefacción eléctrica bajo consumo. Es decir, contar con todas las ventajas mencionadas de un calefactor eléctrico y a un bajo costo de energía.

Esto es posible gracias a los nuevos calefactores eléctricos bajo consumo, los cuales vienen en diferentes tamaños y diseños para ambientes pequeños y más amplios. Para ahorrar el consumo energético se debe prever que la habitación cuente con un buen aislamiento de calor y poca ventilación.

Estufas de cuarzo

Son las estufas más comunes, se utilizan para calentar rápidamente una habitación como el baño, por ejemplo. También se la suele ver debajo de algunos escritorios en espacios muy abiertos. Esto es porque ofrecen un calor direccionado.

Este tipo de calefacción también se la conoce como estufa eléctrica halógena y trasmite calor infrarrojo. Por lo tanto, no son utilizadas para calentar un ambiente amplio, calienta lo que se encuentre cerca y delante de los infrarrojos.

Es importante mantener lejos de ella todos los objetos que puedan quemarse y utilizar la protección contra gotas de agua en caso de utilizarla en el baño.

Convector eléctrico

La mayor ventaja de este tipo de estufa eléctrica bajo consumo es que podemos controlar de manera más eficiente el tiempo de uso. Porque sigue irradiando calor por algunos minutos después de apagarlo.

Estas estufas convectivas calientan el aire que pasa por las resistencias que se calienta con energía eléctrica. Es importante aclarar que las resistencias no son las de metal con alto consumo energético. Estos convectores eléctricos poseen resistencia de cerámica. Las cuales se calientan rápidamente y liberan un calor uniforme por más tiempo que las de metal.

Existen varios modelos, algunos de ellos poseen un ventilador interno, se denominan turboconvectores o termoventiladores. El ventilador permite una mejor distribución del calor en la habitación. La posible desventaja de estos modelos es el mínimo ruido que produce el ventilador.

Estufas eléctricas de aceite

Radiador eléctrico

Este tipo de calefacción utiliza la energía eléctrica para calentar el aceite en su interior. Este elemento es el que finalmente irradia calor a la habitación. Por lo tanto, el consumo de energía es bajo y una vez apagado seguirá irradiando calor por un tiempo más.

Está acompañado de un control remoto, el cual permite ajustarlo a la temperatura deseada. Una vez que el dispositivo alcance dicho valor se apagará y volverá a encenderse cuando necesite alcanzar otra vez la temperatura.

Es una de las estufas eléctricas bajo consumo más utilizada, vienen en una amplia gama de tamaños y formatos para compensar las necesidades de los diferentes espacios.

Caloventor de pared

La gran ventaja de estos dispositivos es que lo podemos ocupar tanto para el invierno como para el verano porque ofrecen las funciones de refrigerar y calefaccionar. Vienen en diferentes tamaños y potencias para satisfacer las diferentes necesidades del ambiente a calefaccionar.

Por ejemplo, para una habitación muy amplia de 20m2 se recomienda un caloventor de pared grande de 3000 frigorías/calorías. Lo cual tendría un gasto energético aproximado de 935Wh por hora.

Una de las desventajas de tener un caloventor de pared en nuestro hogar es que necesita ser instalado en la pared. Conoce los precios de referencia de los electricistas profesionales que pueden ayudarte a calefaccionar tu hogar, instalar o reparar una conexión eléctrica.

Cómo funcionan los paneles calefactores

Panel calefactor

Una nueva y gran opción si se busca calefaccionar la casa de una manera eficiente y ecológica es utilizar un panel calefactor bajo consumo. Su instalación es muy simple, porque necesita colocar unos pocos tornillos para fijarlos a la pared y luego enchufarlo como cualquier dispositivo eléctrico.

Algunos modelos de panel calefactor eléctrico ni siquiera se colocan en la pared, puesto que ya vienen con pie. El consumo de energía de un panel calefactor cerámico es mucho más bajo que los otros tipos de estufas eléctricas, aunque al comienzo tarden unos minutos más para alcanzar la temperatura deseada.

En cuanto a diseños, las estufas eléctricas paneles son cada vez más ingeniosos. Algunos dispositivos simulan ser hogares eléctricos, incluyendo el efecto de las llamas. Lo mejor de un hogar eléctrico es que puedes dejarlo a la vista durante todo el año porque son muy decorativos.

Cómo saber cuál es el consumo de energía de la estufa

Para no tener sorpresas en la factura de luz de fin de mes, es conveniente hacer un pequeño cálculo de cuánto nos costará mantener agradable nuestro hogar o consultorio.

El valor que debes buscar en las especificaciones del producto es el consumo en Watios, indicado con la letra W al lado del valor que el dispositivo ocupa durante una hora de uso. Entonces solo tienes que multiplicar dicho valor por el tiempo real de uso del aparato eléctrico.

Recuerda mantener en buen estado la instalación eléctrica de tu hogar para que sea segura para todos los integrantes de la familia. Si ocurre un cortocircuito o un corte de energía cuando enchufas la estufa eléctrica contacta a un electricista profesional.

Consejos para ahorrar energía utilizando estufas eléctricas

El consumo de energía eléctrica dependerá de cada artefacto y la cantidad de horas utilizadas. Entonces, si se trata de ahorrar debemos usarlo de manera inteligente y disminuir la cantidad de tiempo de uso.

Una forma de hacerlo es apagarla cuando no haya personas en la casa. Este tipo de estufas calientan en muy poco tiempo. También puedes apagar o colocar en la posición mínima cuando todos ya estén acostados.

Durante los días soleados aprovecha la temperatura del sol para calentar la casa. Corre todas las cortinas de las ventanas con los vidrios cerrados, creando una especie de efecto invernadero. De esta manera la casa se calentará naturalmente, ahorrando un poco de energía eléctrica.

Pero no queremos que el frío nos afecte, entonces debemos recurrir a algunos recursos para mantener el calor por el mayor tiempo posible. Una forma de lograrlo es evitar cualquier escape de calor.

Una recomendación es verificar y sellar los marcos de las ventanas y puertas. Si el techo de la habitación es muy alto se podrá pensar en realizar un cielorraso falso mucho más bajo. Otro consejo es colocar piso flotante o alfombra en el piso, porque funcionan perfectamente como aislante.

Cómo limpiar las estufas eléctricas

Las estufas eléctricas no requieren un mayor mantenimiento que la limpieza, como generalmente se almacenan durante el verano suelen juntar polvo. Esto puede producir un menor rendimiento, por lo tanto, se recomienda limpiarlas antes de usarla por primera vez luego de una temporada sin uso.

Una vez que se encuentre en uso frecuente, se recomienda limpiarla al menos una vez al mes. Como no dejan residuos de combustión, la limpieza solo se debe realizar a la superficie externa del mismo.

El primer paso es verificar que el dispositivo esté desenchufado y frío. Después elimina todo el polvo con un plumero, si notas polvo en su interior puedes utilizar una aspiradora manual.

Después repasa toda la superficie externa con un paño húmedo y con uno seco para que la estufa eléctrica quede impecable para su próximo uso.

Recuerda que las estufas eléctricas se enchufan, por lo tanto son seguras en la medida que la conexión eléctrica de la casa u oficina sea segura. Para revisarla puedes solicitar el servicio de un electricista profesional.